Educar en valores no es solamente transmitir buenos modales. También es importante enseñar a distinguir las buenas actitudes de las malas y ayudarles a desarrollar conciencia moral. En este sentido, los cortometrajes son piezas audiovisuales que nos resultan muy útiles para trabajar con la infancia y varios de ellos pueden ser un excelente punto de partida para la reflexión en valores y su importancia.
Con ellos, los niños pueden reflexionar sobre la amistad, la solidaridad, el trabajo en equipo, el respeto a las personas, etc. Empecemos con estos 5 cortometrajes muy interesantes para trabajar diferentes valores:
Cuerdas
Es una historia de inclusión, respeto, amor y vocación. Cuenta la historia de dos grandes amigos. Empieza en el Orfanato Provincial tras el recibimiento de un nuevo estudiante: Nicolás Solís, un niño con parálisis cerebral. Todos en la escuela hablan de él como alguien “especial”.
Sin embargo, para una alumna llamada María, él es sólo un niño que necesita una mano amiga. Aunque sus compañeras la catalogan como “rara”, desde que Nicolás llega, María se acerca a él y encuentra la forma de integrarlo en sus juegos amarrando su mano a la de él con una cuerda. Es un cortometraje de Pedro Solís García, ganador del Goya 2014 en la categoría de “Mejor cortometraje de animación español”.
Cuento del erizo
Es el bullying reflejado en la vida de un puercoespín que es rechazado por el resto de sus compañeros. Mediante la empatía y la amistad por parte de su entorno, consigue ser aceptado y hasta recibe un regalo de sus amigos.
El hombre Orquesta
Su trama recoge la importancia de trabajar en grupo y refleja que las rivalidades no siempre son buenas, en especial cuando son llevadas al extremo y esto implica causarle daño al resto de compañeros. Es una animación Pixar.
Lectura
Corto ideal para promover la lectura y el cuidado de los libros. La lectura desarrolla la imaginación, mejorando la creatividad, por lo que es muy importante que los niños adquieran este hábito para sus vidas.
The Lost Thing
Es un llamado de atención al estilo de vida que llevamos y que, muchas veces, no nos deja ver lo que le ocurre a las personas que tenemos alrededor y sus problemas. En 2011 esta cinta consiguió el Premio Oscar al mejor corto animado.