El Concurso Nacional de Cuento y Poesía nos llenó de Felicidad completa pues en dicho concurso nuestros estudiantes obtuvieron dos de los tres primeros lugares. Paola Andrea Aristizábal y Jesús Orlando Ordóñez lograron los más altos reconocimientos, en la categoría de Discapacidad Cognitiva.
Con su cuento “El Soldado y la Espada”, el joven de 15 años logró destacarse. Encontró el espacio ideal para mostrar sus habilidades en pintura y escritura. Presentó una obra que mostraba sus dos talentos y ganó.
La XVI edición del Concurso Nacional de Cuento y Poesía para Personas con Discapacidad 2019 Sala Jorge Luis Borges que fue organizado por la Secretaría de Cultura de Cali, La Red de Bibliotecas Públicas de Cali y La Fundación Ceartes Estímulo para personas con Discapacidad, tuvo como ganador a Jesús Orlando Ordóñez.
«Desde pequeño me gusta pintar, me hace sentir relajado, sereno. Mi familia me decía que era bonito lo que hacía», cuenta Jesús Orlando, quien desde febrero de 2018 es beneficiario del Instituto Tobías Emanuel. «Acá me siento mucho mejor. Me gusta mucho la ruta, la tranquilidad, los dibujos, el arte y la música. La vida de los soldados me parece muy chévere», agrega.
Basado en ese gusto realizó la obra por la que ganó el premio. «Fue mi abuelo el que me dio la buena noticia. Me dijeron que yo había ganado, me dio mucha alegría», cuenta. Y al momento de dar un consejo para sus compañeros y demás personas en su condición, lo tiene claro: «Les aconsejaría que vengan al Tobías porque aquí no se van a sentir rechazados, ni solitos».
La historia de Jesús Orlando Ordóñez
Y es que Jesús tuvo que sufrir mucho en escuelas anteriores a su llegada al Instituto hace casi 2 años. Fue gracias a su abuelo que le presentó la oportunidad, después de verlo pasar por el bullying en el colegio en el que estudiaba.
La historia de Jesús narra una gran hazaña en la que un soldado de la patria es enviado a defender a su país y llega a una isla en la que tiene que enfrentan piratas para rescatar una espada mágica, un patrimonio de su nación que pronto lleva para su admiración en un museo.
La imaginación de Jesús ahora vuela, porque ha hecho un excelente proceso de avance haciendo parte de la modalidad de Fortalecimiento de Capacidades, del Tobias Emanuel, un programa que ayuda a las personas con discapacidad cognitiva a adaptarse a sus entornos y desenvolverse en ellos hasta llegar a crear un proyecto de vida. Por eso es que Jesús, sueña con ser conductor de ruta escolar y también con seguir pintando, mientras pasa sus días entre el estudio del Tobías Emanuel y la ayuda en el hogar de sus abuelos.
“Su diagnóstico es de Discapacidad Cognitiva Moderada. Vive con sus abuelos y la madre. Actualmente se encuentra a la espera de transición al Programa de Formación para el Trabajo. Ha tenido un buen desempeño y proceso de adaptación», comenta Paola Loaiza, Coordinadora del Programa de Fortalecimiento, sobre el paso de Jesús Orlando por el ITE