Llegó una de las fechas más especiales en el año. Momento para compartir con seres queridos y recomendaciones para hacerlo disfrutando de una Navidad inclusiva.
Es posible tenerla si organizamos algunos detalles que pueden ir desde la comida hasta los regalos, de modo que todos con quienes vamos a compartir ese día se sientan valorados y tenidos en cuenta. La Navidad es una época ideal para poner en práctica ciertos valores relacionados con la inclusión tales como tolerancia, respeto, aceptación e integración.
¿Qué sería una Navidad inclusiva?
Significa que todos, sin distinción, podamos participar de las actividades que se organizan en estas fiestas y, claramente, hacer parte de la celebración. Hacerlo en la medida de nuestras capacidades e intereses, en cualquiera de los aspectos a llevar a cabo dentro de la tradición particular para el festejo.
Para eso es necesario realizar algunos ajustes en ciertas rutinas. Deben tenerse en cuenta tanto las necesidades de la persona con alguna condición como las de todas las demás que participan de la reunión. Podríamos contar con la presencia de personas con discapacidad cognitiva, síndrome de Down, Trastorno del Espectro Autista, entre otras.
Así que hay detalles como los de las luces de navidad, el volumen de la música, los juegos pirotécnicos, entre otros, que podrían motivar una sobreestimulación en algunos de ellos. Es necesario moderar cada una de estas situaciones.
¿Cómo disfrutar de una Navidad inclusiva?
Lo ideal es que todos los invitados participen de las diferentes actividades que se realizan. Un consejo, tal como lo recomiendan en “Mejor con Salud”, es:
- Algunos preparan la comida, otros pueden colocar los platos en la mesa.
- Los niños pueden hacer las tarjetas de invitación; no tienen que ser perfectas, pero sí estar hechas con cariño.
- Todos pueden participar de la decoración; una persona en silla de ruedas puede acarrear objetos y ayudar en lo que sea menester.
- También, puede haber un encargado de la música.
Lo importante es que cada uno aporte desde lo que es y desde lo que sabe y puede hacer. Con esto no solo podremos disfrutar de una Navidad inclusiva, sino que la celebración ayudará a fomentar la autoestima en todos, haciéndolos sentir valiosos y apreciados.